Desde la perspectiva de este joven naturalista, esta tierra es el resultado de una compleja y entremezclada historia natural, desde antiguas y recientes formaciones volcánicas, desde el precámbrico al cenozoico, oscilaciones climáticas que han llevado a esta región a parecer un basto desierto a un lúgubre país boreal. Tales eventos históricos han dejado una huella y marca en la piel de México, sus cordilleras montañosas y suelos son el testigo del acontecer de los millones de años, la antigüedad de algunas de sus montañas podría espantar a cualquier mortal que no vive ni la milésima parte de la edad de un cerro, e incluso los mas recientes volcanes ya tienen edades de millares de años. Todos las variadas escenas de arte natural que se dejan ver en su amplio catalogo de paisajes son resultado de su compleja historia geológica y climática, la cual desemboca en los milenarios conjuntos de historias que se desarrollan entre todos sus hermosos seres vivientes y no vivientes.
Su constitución es un enorme rompecabezas de biomas que no corresponde en su división política producto del hombre, desde sus mares a montañas, norte a sur, es una marea de variadas composiciones de elementos, el tiempo dejo marcado cicatrices que se ven, se sienten y se presencian, no hay nada como ello, México es la fragmentación de los continentes, es el puente que consolida al nuevo mundo. Toda esta interacción de eventos históricos, los surgimientos de montañas, el resurgimiento de las entrañas de mar, los densos cambios climáticos dieron como resultado un una masa territorial que contiene al mundo en sí misma.
El hombre nativo neotropical /neoartico crece a partir del suelo, a partir de los ríos y arroyos que vomitan las montañas, a partir de los sueros vivientes de los silvestres, aquí se convierte en la asimilación del ser viviente racional con la naturaleza, todos viven en el, el vive en todos. La filosofía y forma de vida se moldea y embona en galopante montura con el ciclo biogeoquimico. Las máximas deidas no son más que las manifestaciones de la naturaleza. Su cuerpo es vida y trasciende en los milenios, se pasea en un círculo de materia viva.
Los seres corren, se conocen, esto permite la continuidad del sentido de la existencia, no hay más. Subir y bajar, del calor al frio, de lo agrio a lo dulce, lo que se llama Mexico es una pasaje de infinitas percepciones dentro de los seres con y sin sentidos, cada quien donde se siente mas conmodo. Paleozoico, Cámbrico, Devónico, Mesozoico, Jurasico, Cretacico, Oligoceno, Pleistoceno. La serenidad de los millones de años, todo y nada en la tierra desde el universo.
Comments